Es muy común el miedo al fracaso, el miedo a ir por un camino incorrecto. Y como consecuencia, poner el piloto automático en nuestra vida como si nos tuviésemos que dejar llevar por las expectativas de los demás. Estoy segura de que este es uno de los motivos por los que mucha gente acaba siendo infeliz. Conozco muy bien la sensación de estar atrapada en una realidad que tú no querías construir, o estar viviendo algo que no es para ti. Así que si detectas alguna de estas señales en tu vida: podrías estar viviendo en piloto automático. Pero antes de nada yo soy Lea, y esto es Momento It Girl by Into the Glow.
En primer lugar, cuando a tu alrededor tienes la sensación de que todas las preocupaciones y problemas más graves son simplemente superficialidades. Si llegas a un punto de tortura o sufrimiento con motivo de lo que considerarías superficial, te recomiendo que te pares a pensar si esa exigencia te la impones a ti mismo por tu bien o si es un resultado de lo que tu entorno te exige, incluso de forma subliminal. Hacer este tipo de separación entre lo que es tu pensamiento y voluntad, contra lo que te han hecho creer que lo es: es tremendamente enriquecedor, te llevará a concretar y enfocarte mucho más en tu camino al éxito. Ya que te darás cuenta de que la idea de éxito te la debes fabricar tú.
En segundo lugar, si a menudo tienes muchas dudas de quién es falso y quién no. Es agotador verse continuamente ante la duda de quién te utiliza y quién te quiere… Por eso sugiero que seas inteligente y detectes qué es lo que ha atraído en el pasado a la gente interesada, qué patrones han seguido: así conseguirás seleccionar mejor de quién te rodeas y hasta qué punto llegan ellos en tu vida. Es duro, y haced caso de una chica que se pensaba que todo el mundo tiene buenas intenciones hace nada, pero gracias a eso aprendí a valorar mucho más la sinceridad. A las personas que se acercan con un interés, que se vea claro por qué; mientras que a las que tienen ese mismo interés pero intentan hacerse tus «amigos» hasta que les dejes de servir… Imposible.
En tercer lugar, el sentimiento de no pertenecer a un sitio. Aquí es complicado ver si estás viviendo en piloto automático o no. Porque en ocasiones saliendo de nuestra zona de confort sentimos que no pertenecemos a ese mundo, tras presentarnos ante retos nuevos. Pero para diferenciarlo de esos retos que finalmente te benefician: sabes que estás viviendo en piloto automático cuando estás profundamente incómoda, y además, una vez has pasado por ello, la sensación interna es de rechazo e inseguridades. Ahí es cuando tenemos que tomar acción y preguntarnos si merece la pena seguir asistiendo a esos eventos o relacionarnos con esos entornos.
Por último, si continuamente antepones a los demás a ti. Dejando atrás tus metas, objetivos, y lo que sabes que es correcto. Y aquí es fácil de identificar esta señal por el sentimiento de culpa que estas acciones van a arraigar. Es así cuando se vive en piloto automático.
Sin embargo, me gustaría acabar este artículo diciendo que es posible salir del piloto automático. Y aunque en ocasiones sea complicado, se arregla tomando decisiones difíciles en ese momento: pero que luego llevan detrás un motivo lo suficientemente válido como para decir que no a todo lo demás. Nuestra felicidad.
Si te ha gustado, quédate con Momento it Girl by Into the glow.