Conoce el gran efecto curativo de la sal de mar
La sal de mar es conocida popularmente por su sabor indispensable dentro del mundo de la gastronomía, pero además se utiliza en otros sectores. Así como en confección de textiles, procesado de metales, fabricación de plásticos o usada como tratamientos de medicina y cosmética, entre otros.
Aunque existen muchas variedades de sal, cada tipo nos aporta diferentes propiedades dependiendo de nuestras necesidades. La sal puede contener hasta 80 minerales extras que por naturaleza son altamente beneficiosos para nuestro cuerpo, tiene propiedades antisépticas y es un antiinflamatorio natural.
Las terapias en las termas y los hammam de la cultura árabe han hecho de los baños de sal un ritual de de juventud y belleza. La sensación del calor y el efecto relajante de las sales dilatan los poros en nuestra piel y permiten desintoxicar el organismo. Estos tratamientos son ideales para desinflamar y relajar el cuerpo, tienen un gran efecto revitalizante y curativo que hacen de un mero placer una adicción.
Cada vez son más las personas que utilizan los baños de agua y sal para fines terapéuticos. La cantidad de sal marina que agregamos absorberá los minerales en forma de iones, esto ayudará a descontraer los músculos y activará los mecanismos de curación. Agregar en nuestra bañera una taza de sal marina y sumergirnos hasta 20 minutos, aliviará nuestros músculos cansados y además facilitará la eliminación de callosidades.
Las sales de mar que podemos aplicar como tratamiento de salud y belleza
Existen muchas variedades de sales en el mercado y cada una tiene diversos beneficios que podemos adaptar según nuestras necesidades.
Las conocidas sales del Himalaya son las más ricas en minerales como el calcio, el hierro, el cloruro de sodio o el zinc. Esta sal está especialmente indicada para tratamientos cosméticos como elemento natural para la limpieza, rejuvenecimiento y cuidado de la piel. Contiene excelentes propiedades como limpiadora, exfoliante, calmante y acción regeneradora, entre otras.
La sal del Mar Muerto es rica en minerales como el carbonato de magnesio, yodo, potasio, bromo o azufre. Estos componentes ayudan a estimular la circulación sanguínea y linfática que activan la depuración de nuestro organismo. Renuevan y rejuvenecen la piel incrementando el torrente de oxígeno facilitando la hidratación celular.
Las sales de roca con un alto contenido en minerales yacen bajo tierra y se extraen mediante depósitos subterráneos. Indicadas para dolores articulares equilibran nuestra energía, y ayudan en la salud de nuestra piel causando un efecto calmante y reparador. Otras terapias aplicadas a esta sal es la haloterapia, especialmente indicada para afecciones respiratorias y de la piel, como dermatitis atópica o psoriasis.
Las sales marinas están indicadas también para el tratamiento de la piel, gracias a su poder bactericida curan heridas y previenen infecciones. Hacer gárgaras con agua salada es un remedio casero que aliviará el dolor de garganta y la desinflamará, a su vez que desinfectará nuestra boca de gérmenes.
La exfoliación mediante estas sales eliminará células muertas y otras impurezas acumuladas por los agentes externos como la contaminación medioambiental o exposición solar. Prepara una mezcla de esta sal con una cucharadita de aceite de oliva o almendras y en la ducha masajea todas las zonas del cuerpo. Reduce la celulitis y elimina las pieles muertas. También puedes masajear suavemente tu cabeza con sal gruesa, deja que actúe 5 minutos y aclara con agua abundante. Ayuda a combatir la caspa del cuero cabelludo favoreciendo la renovación celular.
Para resecar estos granitos, espinillas o puntos negros solo tenemos que aplicar sal humedecida en agua o aceite. La capacidad de estas sales naturales ayudan a mantener limpios los poros de la piel controlando la producción de sebo como efecto astringente contra el acné.