¿La figura mediática más relevante de las últimas décadas?
No, no son las Kardashian. Hay una mujer etérea que nunca pasará de moda. Esa es Lady Di. Madre afectuosa, corazón caritativo y un dolor de cabeza para la familia real británica. El destino de Diana Spencer era convertirse en un referente mundial.
Ya antes de convertirse en princesa de Gales consiguió atraer todas las miradas por su carácter dulce y aniñado. Pero, en la vida real, no todos los cuentos de hadas tienen un final feliz. Di se vio inmersa en un matrimonio evocado al fracaso, unos protocolos tan rígidos que la asfixiaban, una marabunta de paparazzi que la acosaban a diario y una depresión que desembocó en trastornos alimenticios.
Obligada a no salirse de su papel como esposa del futuro rey y observando que sus gritos de socorro eran ignorados, Diana se puso en pie para darle un vuelco a su vida. Decidida a ser feliz, utilizó toda la inteligencia y fuerza que la caracterizaban para imponerse ante la desdicha. Es en ese momento cuando Lady Di sienta precedentes impensables para una monarquía. Las reglas del juego ahora las ponía ella.
La inusual princesa aprovechó su gigantesca visibilidad en medios para ganarse el favor del público al completo, a través de sus estrategias de marketing. Sí, podría decirse que Diana era publicista nata que supo gestionar su imagen a la perfección: la niña tierna e ingenua, la princesa cuya belleza y cercanía enamoraban, la víctima de los descorazonados miembros de la realeza, la santa que lucha por los más desfavorecidos, la feminista liberada y, por último, su transformación en diosa terrenal.
Di sabía qué hacer o decir para ser el centro de las portadas y conseguir alabanzas. Incluso las publicaciones más críticas causaban furor por el simple hecho de estar protagonizadas por ella. Lamentablemente, la mujer más famosa y querida del mundo tuvo un trágico final que conmocionó a la sociedad de la época y aún hoy sigue resultando de los hechos más impactantes de la historia reciente.
Recordándola desde la más profunda admiración, más allá de las polémicas, Lady Di dejó un magnifico legado que ha inspirado al resto de mujeres. Su influencia perdurará para siempre.
Su estela también se siente en la moda. Gracias al estreno de la nueva temporada de »The Crown» hemos podido rememorar aquellos looks que dejaron huella. La princesa de Gales es uno de los iconos de estilo por excelencia. Una trendsetter que renovó los códigos de vestimenta de las casas reales. Existen hasta cuentas de Instagram como @ladydirevengelooks que recopilan sus outfits. Por ello, es de imperiosa necesidad hacer un repaso a su vestuario para analizar su repercusión. ¡Allá va!
El deporte era una de las pasiones de Diana. Pero, sus outfits no se basaban en un simple conjunto de chándal. Ella dio un giro a la ropa deportiva, siendo una de las primeras en llevar la tendencia Athleisure. Es decir, prendas para hacer ejercicio combinadas con otras más casual. Estos estilismos bien los podría lucir ahora Bella Hadid ¿Verdad?
La princesa de Gales se atrevió a llevar smoking, desafiando el protocolo de vestimenta real. Ningún miembro femenino de la monarquía lo había llevado antes. Si bien es cierto que Yves Saint Laurent fue su creador y Bianca Jagger una de las musas que lo introdujo, Diana fue quien más impacto causo.
¡Nos vamos de fiesta! Como amante de la moda, Di no iba a elegir los clásicos y pasados de moda vestidos que se asocian a la realeza. Escotes asimétricos o de pico, mangas abullonadas, telas metalizadas y brillantes, cuerpos corsé… Todo lo que podríamos encontrar ahora en tiendas.
Aquí podemos observar el influjo que otra mujer de envergadura como Jackie Kennedy tuvo en ella. Lady Di se inspiró en varios looks de corte preppy americano tales como los conjuntos ladylike de chaqueta y traje, las perlas y las camisas con jerséis anudados al hombro, en clave más sport. Seguro que Jacqueline era fan número uno del estilo de Diana. Este estilo es un must para conseguir outfits elegantes y un genial fondo de armario.
La princesa Diana fue el mejor ejemplo de una mujer empoderada. Su figura no se desvanece. Sus hijos son el reflejo de su alma y la continuarán honrando, siguiendo sus pasos. ¿Qué faceta de Lady Di es la que más te fascina? ¿Cuál de sus estilismos es tu preferido? Háznoslo saber en comentarios.